· Objetivo del uso de la faja lumbar
El objetivo principal del uso de la faja, es el proteger, reducir y/o eliminar las molestias y lesiones en la zona lumbar, y de esa manera incrementar la eficiencia y la productividad.
Es importante destacar que existen estudios e investigaciones internacionales que se basan en la determinación de la efectividad del uso de las fajas, para no producir lesiones de tipo lumbar, mediante el estudio biomecánico de los efectos posturales, los movimientos (levantar, sostener y mover) y las rotaciones con o sin carga (giros laterales en posición correcta de pie o encorvado).
· Antecedentes del estudio
No está probada la efectividad del uso de las "fajas" para la espalda, en trabajadores sin lesiones, con el fin de disminuir el riesgo de sufrir daños en la espalda. Por lo tanto, NO son consideradas como un equipo de protección, además, las fajas no mitigan los peligros a los que se ven expuestos los trabajadores por realizar repetidamente acciones tales como: levantar, empujar, halar, torcer, flexionar o extender la columna.
Para muchos trabajadores el uso de las fajas les da una "falsa sensación de seguridad", creen que están protegidos de lesiones o enfermedades cuando ningún dispositivo externo, incluyendo los yesos, inmoviliza completamente o protege una parte del cuerpo.
El uso prolongado de las fajas o cinturones de seguridad, producen un aumento de la presión sanguínea, lo que predispone en la formación de hernias inguinales y varicosidades en los testículos.
El uso de la faja para la espalda puede producir un esfuerzo temporal sobre el sistema cardiovascular y en trabajadores, con un sistema cardiovascular comprometido, pueden estar en mayor riesgo cuando hacen ejercicios o trabajan con soportes en la espalda.
Las fajas o correas NO reducen considerablemente el rango de movimiento alrededor de la columna como para disminuir significativamente la carga sobre las estructuras vertebrales. Además es posible que la resistencia que proporciona una correa pueda incrementar la carga sobre la columna, especialmente sobre el levantamiento asimétrico, debido a la necesidad de incrementar las fuerzas musculares para superar la resistencia de las fajas.
· Mecanismo de acción de la Faja Lumbar
1) De acuerdo a lo que se aprecia en la figura 1. la faja de protección lumbar no afecta el punto de apoyo de la columna vertebral en el sacro (L5-S1), por lo tanto, cualquier golpe en las plantas de los pies en posición de parado, o en el coxis, protuberancias isquiales, nalgas en posición de sentado, o cualquier choque (golpe) en el cuerpo en dirección de los pies a la cabeza, que esté alineado al eje de la columna o tenga una alineación aproximada, o viceversa (de la cabeza hacia abajo), es absorbido por las articulaciones, especialmente la sacro-lumbar (disco L5-S1).
Es decir toda la carga del golpe es absorbida por la mencionada articulación independientemente si se usa faja o no.
Figura 1. Posición de la articulación L5-S1 (punto de apoyo de la columna lumbar en el sacro).
2) Según se observa en la figura 2. el uso de la faja no puede afectar los músculos largos de la región dorsal del tronco donde están los extensores que como se mencionó, inclinan la columna vertebral hacia atrás o la yerguen y mantienen en posición erecta al individuo.
Figura 2. La faja frente a los músculos largos de la región dorsal
Figura 3. La faja frente a los músculos rectos y transversos de las paredes del abdomen.
La flexión del tronco hacia a delante está dada por varios músculos, cuatro de ellos forman la pared del abdomen que también mantienen las vísceras en su posición.
3) El recto mayor del abdomen que es un músculo alargado, se extiende desde la parte delantera de las costillas hasta el pubis, (como se ve en la figura 3.) es uno de los músculos responsables de inclinar el cuerpo hacia adelante, es tomado por la faja y el conjunto de los otros tres músculos abdominales (el oblicuo mayor, el oblicuo menor y el transverso) que también son afectados (ver figuras 4 y 5.)
Figura 4. Faja tomando los músculos superficiales de la pared abdominal
4) Al contraerse bilateralmente los oblicuos flexionan el tronco reforzando la acción del recto mayor; son sostenidos por la faja y se tiene que el transverso más que movimiento, hace de contención de las vísceras.
Por lo expuesto en este punto y el anterior tenemos que la faja hace de zuncho sobre estos músculos y la persona al inclinarse, hacia delante o inclinarse hacia los costados (inclinación hacia adelante con rotación), contrae los músculos por consiguiente hay una expansión hacia fuera, la cual no se puede lograr por el efecto de la faja, por lo tanto, lo hacen hacia adentro presionando los órganos internos. Produciendo efectos negativos sobre la digestión.
Figura 5. Posición de la faja sobre la segunda capa de músculos de la pared abdominal.
5) Los músculos flexores actúan junto con los dos músculos de los lomos, el cuadrado lumbar, otro es el psoasiliaco, (ver figura 6.), no son afectados por el uso de la faja de protección lumbar, dada la ubicación en que se encuentran.
Figura 6. La faja frente a los músculos lumbares vistos por delante
Figura 7. La faja de protección lumbar sobre los músculos anchos de la región dorsal del tronco
· Conclusión.
Los expertos en medicina y ergonomía de la N.I.O.S.H, afirman que las Fajas Lumbares NO reducen el riesgo de desordenes traumáticos acumulativos y lesiones a la espalda, en los Centros de Trabajo donde sus Trabajadores los utilizan.
Si bien contamos con estudios realizados por
1) El personal al cual se le entregaba la faja de protección lumbar, recibió el elemento con muy buena predisposición, trabajaba con más confianza, aumentaba el ritmo de trabajo, inclusive dejaba de preocuparse por el control de los movimientos, velocidad, amplitud, rotación de la columna, rotación con flexión de la columna vertebral, etc. (Efecto psicológico).
2) Como consecuencia del uso de la faja de protección se notó que todos aquellos que la tenían colocada con corrección pese al aumento de ritmo y confianza, la amplitud de los movimientos era menor, por la restricción que le generó el apriete de la faja. En consecuencia diremos que aumentaron la eficiencia (ritmo) y bajaron la eficacia (precisión), de los movimientos.
3) Con el calor y/o humedad la faja genera molestias de picazón, hinchazón y si no se afloja termina presionando y generando molestias.
4) Después de comer o beber mucho el personal llegó a tener problemas digestivos como consecuencia del apriete de la faja de protección (arcadas, eructos y malestar, como sentir apretado el vientre).
5) Cuando se realizaban trabajos violentos en lo que se refiere a movimientos y esfuerzo la faja en muchos casos llegó a molestarlos, por lo que la aflojaban.
6) En movimientos de flexión combinada con rotación, las limitaciones que efectuaba la faja eran pocas, al igual que la flexión simple.
7) La aparición de lumbalgias surgió tanto en las personas reacias al uso de la faja como en los adictos:
7.1. Las lumbalgias se dieron con más frecuencia en las personas con antecedentes que en los que nunca la tuvieron.
7.2. Prácticamente todas las personas con antecedentes tuvieron más de una vez dolores en el transcurso de los dos años de observación.
7.3. Las personas con más de 35 años fueron las más afectadas.
7.4. Se dio el caso de hernias de disco en personas jóvenes, cabe destacar el caso de una persona de 22 años sin antecedentes de ninguna índole, perfectamente sano y usando la faja de protección lumbar se hernió al tratar de levantar un bogie descarrilado en una rampa, por medio de una barreta usada como palanca, apoyada sobre un taco que a su vez se apoyaba en un durmiente.
1 comentario:
Cheers for submitting this. This addressed a whole lot of concerns in which I had.
faja lumbar
Publicar un comentario